El País |
Martes, 26 de junio de 2001 |
OPINION
Interinos
En primer lugar aplaudir la noticia de EL PAÍS del 22 de junio, en la que se hacía eco de una realidad, la de los interinos enchufados de lujo, que se han valido de amistades varias para ascender a puestos del Grupo A. Soy funcionario desde hace más de 25 años y nunca como ahora he visto tantos desmanes en la gestión de personal de la Generalitat.- Juan González Calvo. Alfara del Patriarca.
Soy funcionaria de carrera del Grupo C en excedencia y para ser interina de lujo, he aprobado dos ejercicios de la oposición del Grupo A de 1991, por eso estoy en la bolsa, he tenido que renunciar a 17 años de antigüedad, he perdido mi puesto y mi derecho a la promoción interna, he gastado mi dinero en una academia y he dedicado muchas horas preparando estas oposiciones. Ya en vano porque es evidente que sus artículos haran buena mella en el ánimo de quienes me examinen.- Carmen Guerrero.
Para que quede clara la posicion de las personas que, como yo, formamos el colectivo de interinos de la Generalitat quisiera decir que cualquier trabajador que lleve cierto tiempo de forma ininterrumpida en cualquier empresa tiene unos derechos adquiridos, que en el caso de la empresa privada rondan los 13 meses para que se convierta en contrato indefinido. Aunque normativamente este derecho no existe para el funcionario interino, queremos que se reconozca, porque moralmente pensamos que existe. ¿Por qué para el sector privado sí y para nosotros no? Y deberíamos exigir a la Administración que convoque pruebas para nuevas plazas año tras año.- Miguel A. Cerezo Rius.