Las Provincias, 29/05/2001
OPINIÓN
Interinos y opositores
Por Bernardo Guzmán
El pasado sábado, el president Zaplana sorprendía a propios y
extraños proponiendo un gran pacto para que los 25.000 trabajadores interinos de la
Generalitat pasen a ser fijos, algo que viene siendo reclamado desde hace mucho tiempo por
oposición y sindicatos. Así las cosas, lo fácil para mí sería sumarme a esas tesis y
granjearme la simpatía de todo el colectivo. Algo así ha debido pensar Zaplana cuando ha
lanzado esta propuesta después de seis años negándose a atender sus reivindicaciones.
Sin embargo, quiero trasladarles una reflexión, aunque me
gane alguna incomprensión. No es que esté en contra de una solución para todas esas
personas que, en muchos casos, llevan más de una década padeciendo una angustiosa
precariedad laboral y viendo como la continuidad en su trabajo pende de un hilo, pero sí
quiero recordar que, en su día, no fueron seleccionados en sus respectivas oposiciones y
que ahora hay otros muchos miles de valencianos que, con toda legitimidad y como ellos
hicieron en su momento, están esforzándose al máximo preparándose para poder obtener
una plaza como funcionario. Ese es un aspecto fundamental que no puede olvidarse porque
igual que partidos y sindicatos se ocupan al mismo tiempo de los trabajadores en activo
que de los desempleados, deben ocuparse sin distinciones de los interinos y de los
aspirantes a la función pública. Encontrar una fórmula legal, pero también justa, para
ambos colectivos debe ser el objetivo del actual gobierno autonómico.